Respirar es algo que hacemos en automático. Nuestra vida depende de ello, pero aún así lo hacemos mal. ¿Por qué lo hacemos mal si es algo que nos viene natural? Por lo tensos que estamos siempre. Si como muchas personas, estás estresado y con dolor de espalda, probablemente estás aguantando tu respiración. Respirar profunda y calmádamente es un buen paso para aliviar los dolores de espalda.
Por un momento ponle atención a tu respiración. Ponle atención a los siguientes aspectos:
Sólo el apuro de ir de un lugar a otro o decidir rápidamente sobre algo hace que, por instantes, pausemos nuestra respiración.
Si estuvieses respirando calmada y profundamente lo sentiría alrededor del ombligo; así como respiran los bebés. Generalmente, en el apuro del día, lo sentimos en las costillas y la espalda alta. Por esta razón el diafragma, el músculo que nos ayuda con la respiración se debilita (como todos los otros músculos que no usamos). En cambio los músculos de la espalda alta y el cuello están trabajando de más para acompañar nuestra respiración, por lo que se tensan. Respirar bien, te ayudará a relajarte y al relajar los músculos podrás respirar aún mejor.
Realiza ejercicios de respiración por cinco minutos, podrás ir aumentando a 10 o 20 minutos con la práctica, pero con solo cinco minutos te sentirás más relajado y menos ansioso.
Para calmarte realiza el siguiente ejercicio:
Esta es una respiración relajante que ayuda a ejercitar el diafragma. ¡Usala para calmar y enfocar la mente! ¡Acompáñala con el aroma o aceite esencial que necesites!