¿Te has preguntado cómo mezclar aceites esenciales? ¿Cómo hacen todas esas mezclas de aceites esenciales que llevan 3 gotas de esto con dos gotas de aquello y una gota de esto otro? En esta entrada te contamos todo lo que debes saber para hacer tus propias mezclas de aceites esenciales.
Pero antes de entrar en detalles, repasemos…
Los aceites esenciales son sustancias (compuestos aromáticos volátiles) extraídas de plantas que se valoran por su aroma y por las propiedades terapéuticas que se les atribuyen. Algunos aceites esenciales son buenos para dormir (para conciliar el sueño) como la lavanda, otros para la ansiedad como el aceite esencial de naranja dulce, por ejemplo y así… Tienen muchos usos y son los actores principales de la aromaterapia.
No son aceites en el sentido químico de la palabra. Es decir no son ácidos grasos como el aceite de oliva, el aceite de coco o el aceite de aguacate. Algunos son extraídos por prensado, otros por destilación y otros utilizando solventes.
Según la planta se utilizan sus flores, hojas o tallos. Suelen ser costosos por la cantidad de materia prima que se necesita procesar para obtenerlos. Imagínate que para obtener 5 ml de aceite esencial de rosas se requieren aproximadamente ocho mil rosas y el precio de estos 5 ml está por el orden de los 200 dólares.
Al escoger tus aceites con una finalidad específica lo ideal, para ser precisos, sería revisar el nombre científico de la planta utilizada y el método de extracción. Prefiere siempre los aceites prensados o extraídos por destilación al vapor.
¡Primero, lo primero! Estos son los tres criterios que debes tomar en cuenta a la hora de realizar tus propias mezclas de aceites esenciales:
Ahora repasemos uno por uno cada criterio para decidir que incluir y qué no en cada mezcla.
La forma más común en la que se emplean los aceites esenciales es para ambientar los espacios para lograr un estado de ánimo determinado. Con el mismo propósito también se pueden aplicar sobre la piel; siempre diluidos. Para leer sobre cómo diluir los aceites esenciales para aplicarlos en la piel haz click aquí.
Muchos estudios sugieren que los aromas pueden afectar nuestro estado de animo. Según su composición pueden relajarnos, ponernos alerta o ayudar a concentrarnos. Esto se ha estudiado con mediciones de ondas cerebrales, estudios de desempeño y encuestando a los sujetos del estudio.
Por otro lado se sabe que nuestro sistema olfativo está directamente asociado a nuestros recuerdos y es por eso que algunos olores nos transportan a momentos específicos y evocan las mismas sensaciones que vivimos en aquellas situaciones.
En resumen, dependiendo de el estado de animo y las sensaciones que quieras evocar puedes escoger los aceites esenciales a incluir en tu mezcla procurando que todos los aceites que incluyas tengan el mismo objetivo.
¿Cómo sabes qué aceites evocan que estados de ánimo o sensaciones? Hay varias escuelas o corrientes que nos ayudan a responder esa pregunta.
Según compilaciones de estudios científicos, entre los aromas relajantes podemos mencionar: lavanda, geranio, naranja y patchouli. Los aceites esenciales para la productividad más estudiados son el romero y la menta. Un aceite muy valorado por sus propiedades antisépticas es el aceite de árbol de té (maleluca alternifolia).
En el caso del ayurveda, debe considerarse el grado de humectación y su temperatura al contacto con la piel de cada aceite esencial. De modo que estos pueden ser cálidos o fríos y humectantes o desecantes. Por ejemplo, el aceite esencial de naranja dulce (sweet orange) es un aceite cálido y humectante, mientras que el aceite de menta es un aceite frio y desecante (que reseca; elimina la humedad).
Además de conocer el efecto que queremos lograr con los aceites, a la hora de realizar tus propias mezclas debes considerar el orden en que serán percibidos los diferentes aromas, si te interesa lograr un aroma profundo que vaya cambiando en el tiempo sin que los aromas de tus ingredientes se peleen y se anulen entre sí…
¿Eso que significa? Recuerdas las veces que te has probado un perfume? Cuando recién lo aplicas sientes un olor y a medida que va pasando el tiempo el olor que percibes cambia. El primer olor se disipa y sientes un olor intermedio, que poco a poco se va disipando hasta que sientes un ultimo aroma; que es más sutil y profundo que los anteriores, pero que se queda contigo durante más tiempo.
Esto se debe a que las mezclas se trabajan por notas. Es decir por qué tan rápido vas a sentir determinado aroma de una mezcla. En perfumería se habla de notas altas, medias y bajas.
La nota de un aroma depende de la tasa de evaporación y la volatilidad (que tan rápido se esparce) del aceite esencial. Por ejemplo si juegas con eucalipto y naranja, el eucalipto es mucho más volátil por lo que lo sentirás de primero y así mismo se disipará más rápido, es un aroma con una nota alta. Dirás este aceite de eucalipto se siente mucho más que el aceite de naranja, pero a los minutos ya se habrá disipado y empezarás a sentir el aroma a naranja.
Esto es solo por poner un ejemplo para ilustrar este punto, ya que no recomendaría utilizar estos dos aromas en la misma mezcla debido a que tienen efectos contrarios. El eucalipto es un aroma estimulante, desecante y refrescante. Mientras que la naranja es cálido, humectante y calmante. Debemos procurar que los aceites esenciales de una misma mezcla tengan las misma cualidades para lograr nuestro objetivo, tal y como lo mencionamos en el punto 1. De lo contrario el efecto de uno anulará, el efecto del otro y no lograremos nuestro cometido.
Las proporciones de los aceites en una mezcla pueden determinarse por la volatilidad o la nota de la fragancia.
Estas proporciones pueden variar ligeramente de una fuente a otra. Al final tu eres el autor de tu mezcla, así que prueba y experimenta con utilizando estas guías, pero recuerda que no estás amarrado a ellas. No va a venir la policía de los aceites esenciales a multarte.
Otro factor a considerar a la hora de diseñar tu propia mezcla es el costo del aceite. El costo del aceite esencial depende principalmente de la abundancia de la materia prima para su extracción y del método a utilizar.
Por ejemplo, el aceite esencial de naranja se obtiene por prensado de la cáscara de la naranja dulce. Mientras que el aceite de Neroli, se obtiene por medio de la destilación al vapor de los pétalos de naranja agria. Es fácil intuir que hay una gran disponibilidad de cáscaras de naranja dado que este es un cultivo que se emplea para consumo, la cáscara no es tan delicada como el pétalo de la flor y es además mucho más abundante.
Por regla general los aceites extraídos de flores son más costos que los extraídos de hojas o tallos, y estos a su vez son más costoso que los extraídos de cáscaras de frutos comerciales.
Una vez logres tu mezcla de aceites esenciales recuerda diluirla en un aceite portador o utilizarla en tu difusor (3 a 5 gotas por cada 100 ml de agua).
Esperamos que estos lineamientos te ayuden a la hora de realizar tus propias mezclas. Si tienes dudas escríbenos y con gusto te asesoramos.